jueves, 10 de julio de 2008

Oro y plata que cesan siempre jamás



¡Abajo con el cuento de la escalera social!. Sólo hay dos condiciones que permiten subir y bajar de clase a la velocidad del rayo: turista o cooperante internacional. Y si eres las dos cosas a la vez, ni te cuento. ¿Se puede pasar de ser un currito a ser un cliente mimado en tabernas tradicionales, de los cerros a los clubes de jazz, del polvo a los museos? Se puede. ¿Se puede ir de mani en taxi? Se puede. Ya os lo digo yo.

Ayer paro nacional.
Chic@s me he superado: agarré un taxi porque llegaba tarde a la marcha, tuve que presionar al taxista que no quería ir porque la zona estaba cerrada... y al doblar una esquina, y emulando la heroica foto de Tiananmen, nos hemos visto las caras, frente a frente, mi taxi, mi taxista, yo y una tanqueta que lanzaba un humillo blanco que (habéis acertado) eran gases lacrimógenos…Nos los hemos comido por las ventanillas abiertas y el taxista no sabía cómo aparcar porque lloraba, y por que estábamos en medio de gente corriendo. Estábamos a cinco cuadras del Congreso y llegamos justo en el momento en que disolvían la marcha y la gente se escapaba por donde podía. Una vez repuesta de la llorera y del tembleque en las piernas me he puesto a husmear por la zona y he comprobado lo que mi taxista ya me había dicho: la zona estaba sellada y no sólo por columnas de antidisturbios cholos con sus escudos y caballos en todas las cuadras, sino por unas vallas muuuuuuuy disuasorias.

No perdáis tiempo imaginando un escenario de lucha callejera porque la normalidad de la Lima ruidosa y contaminosa se ha impuesto en pocos minutos. La marcha en Lima fue tan "discreta" como las nuestras. Lima no es Perú. Flota sobre el Perú. Y sí: ¡la foto es mía! Después de alguna sugerencia amable off the blog (pilla la puta cámara, me dijeron) la saqué pero comprenderéis que hice mierda de fotos en medio del bakalao. Encontré sin embargo esta pintada en el Parque de la Exposición que es bastante fiel a la imagen de los jovencitos con los que me crucé en la mani, incluida la máscara antigas (ellos sabían).

En el resto del país y sobre todo en algunas regiones de la sierra y la selva sí ha habido paro y detenidos. En cada región las razones eran distintas o sea que la lista sería larga y el post excesivo, pero resumiendo se trata de un rechazo frontal a la política económica del gobierno y a la batería de cambios legislativos (sin consulta al Congreso) que se han aprobado recientemente para adaptar el país al TLC, o sea, para poder seguir vendiéndolo al mejor postor, sin demasiadas complicaciones. Tierras, aguas, bosques, puertos y aeropuertos (¿os acordáis de mi primera taxista?) están afectados y se facilita el trabajo a las empresas mineras y petroleras, contra las cuales las comunidades campesinas ya están en pie de guerra. Sobre todo van a por ellas. Se han tocado leyes para que los inversores puedan entrar en los territorios sin permiso de las comunidades indígenas, y para dar uso agrario a espacios que hasta ahora estaban vedados.

Alán García, pedagógo donde los haya, dice de estas comunidades campesinas que son el perro del hortelano, que ni comen ni dejan comer ya que tienen recursos a los cuales no le sacan partido, y además no permiten que otros se lo saquen (aquí más info). Su idea, original y estratégica es abrir “nuevas áreas para la inversión dentro del país en zonas que, por razones ideológicas, aún permanecían cerradas” (aquí más info)

“Por razones ideológicas”... qué cosa tan horrenda. Esa gente oscura siempre frenando el desarrollo. Lo mismo debió pensar Pizarro cuando se cargó a Atahualpa. En el Museo Arqueológico, acompañando las piezas de orfebrería de la época, encontré esta maravilla:

“Por las faldas de esta cordillera se han hallado grandes mineros de
plata y oro. Y en todo el reino del Perú; y si hubiese quien los sacase hay oro y plata que cesan siempre jamás, porque en la sierra y en los llanos y en los ríos, y por todas partes que caven y busquen hallarán plata y oro. Sin esto, hay gran cantidad de cobre y mayor de hierro por los sacadales y cabezadas de las sierras que abajan a los llanos. En fin se halla plomo y de todos los metales que Dios crio es bien proveido este reino”
Pedro Cieza de León 1541. Crónica del Perú.)


De 1533 hasta ahora, nada ha cambiado. Detrás de las riquezas del Tawantinsuyu que, como bien decía el cronista, no se acaban nunca. Las venas abiertas siempre. Y los Alanes García de turno que no aprenden. En el Museo Arqueológico se recrean las dos salas repletas de piezas de oro y plata, hasta una altura de dos metros, que Atahualpa prometió para que lo liberasen… Igual le dieron garrote y hoy se les estrangula con el TLC y sus variantes.

Atahualpa aceptó bautizarse para no acabar en la hoguera porque entonces no podía convertirse en mallqui y moría definitivamente... ¿Atahualpa está detrás del paro nacional? No seré yo la que alimente esa teoría porque, que me perdonen las divinidades incas de buena voluntad, si yo hubiera vivido entonces... habría sido de las que facilitaron la conquista. El Machu es la capital del imperio, el famoso Camino Inca, la forma de controlarlo, y su arte exquisito y sus avanzadas técnicas agrícolas fueron el fruto todas las culturas que arrasaron a su paso. Voy poco a los museos... pero les saco partido.

¿Por dónde iba? Como quiera que yo he venido aquí a aprender comunicación política, he tenido un recital con la campaña del gobierno contra el paro. Ha incluido desde promesas de pagas para los que no pudieran trabajar, a amenazas de sacar el ejército a la calle. Además el partido del presidente ha enviado a sus cargos a hacer pintadas en los muros y como guinda ha pasado por televisión un spot con imágenes de Montesinos diciendo de los sindicatos convocantes que con la dictadura no se atrevieron. A-lu-ci-nan-te. Lo más mejor de todo es que una cadena de televisión mostró los documentos que confirmaban que el gobierno pasaba la factura del spot al PNUD !!!! ¿Es a esto a lo que se refieren cuando hablan de governance?. El dinero del desarrollo, ya se sabe.

En el blog de un escritor peruano
del Barça llamado Lápiz y martillo (el blog, no el escritor) he encontrado un poema-razón para la huelga, que me da mejor rollo que la idea de un Atahualpa kale-borroka. “No conseguimos evitar el rencor de nuestros hijos en la mesa vacía”.

Y además de estas cosas os cuento que por las mañanas voy teniendo reuniones y que se me acumulan los libros y los papeles, y que me la paso preparando entrevistas y algún viaje…

Respecto a vuestros comentarios on y off the blog…
Los demás miran a sus hijos y dicen que es lo mejor que han hecho. Pues yo tengo amig@s y además mu list@s y sensibles. Qué orgullosa estoy de l@s de siempre... y de las nuevas adquisiciones. Pero creo que me voy a quedar aquí porque sólo me decís cosas bonitas mar mediante. Aprovecho para confirmar que aunque Joan me hace algunos favores con las imágenes (y aunque no lo descarto en el futuro, como no descarto la liposucción), no ha retocado mi foto. Lo juro.

Mensajitos dedicados pero compartibles…
Franky: En el museo os compré la postal de una pieza de cerámica que recrea un parto natural de la época para engrosar vuestra lista de argumentos a favor de esa lucha vuestra (cuéntale a Lúa). Haz el favor de no dejar morir Waslala hasta que yo llegue. ¿Vamos a acabar reuniéndonos en un huerto?

Bibi-Jordi: ¿Os he contado que aquí hay 200 variedades de patata? Hacen festivales de degustación… ¿Llevo algún…qué?, ¿brote, esqueje, semilla?, ¿cómo va eso? ¿cómo “surgen” las patatas? Que alguien con conocimientos de vida vegetal me indique… Me han dicho que venden ayahuasca líquida en el mercado del Cuzco…¿plantamos de eso también?

Amaia: ¿¿¿¿Chicha???? Donde neuronas y años, no chicha. Deberías saberlo. Alguien (¡con camisa de flores!) me entró con la pregunta: ¿vino con su familia? Imagínate qué imagen proyecto. Y mira que he seguido vuestros consejos y procuro hablar bajito y como señorita…

lunes, 7 de julio de 2008

Esto también es Lima



Como “proletaria que muero de universo”, por fin salí de la burbuja y llegué al Perú real. A hora y media de la Lima Northface y Babyalpaca de los turistas. De la Lima donde por 50 dólares puedes saltar 10 minutos en parapente por encima del mar y los rascacielos. Por fin decidí sacar mi cámara…y estaba sin batería. Ayer Luz Arelis, una chiquita de 24 años que la Diputación invitó a Barcelona en abril como lideresa política, me invitó a comer a su casa. Por el camino no paraba de advertirme que se trataba de un barrio muy popular…

Huaycán es un asentamiento urbano, una comunidad autogestionaria de 120.000 familias, un terreno invadido legalmente, uno de los miles de cerros de las afueras de Lima ocupados por la gente que va llegando del campo, desde los años 80. Cuanto más arriba más pobres. Pura subida y puro polvo. Puras cuevas excavadas hacia fuera, en unas laderas sin asomo de verde, en riesgo permanente de desprendimiento o temblor. Un campo de refugiados en vertical. El polvo y el ruido que levantaban los mototaxis (hasta arriba no sube otra cosa) eran los de Mad Max, los de las guerras del fin del mundo. Giraba sobre mí misma intentando encontrar los límites de la miseria en telemascope y casi me da un ataque de risa pensando en los proyectitos de las ONG (aquí hay cientos de ellos, y tienen agua gracias a la cooperación oficial de algún país simpático).

“Miro el dolor del hambriento y veo que su hambre anda tan lejos de mi sufrimiento, que de quedarme ayuno hasta morir, saldría siempre de mi tumba una brizna de yerba al menos”. ¡Qué diferencia con la pobreza rural y con la de antes del arrollador desarrollo!. Con todas las fotos que no hice podría haber ilustrado los folletos de todas las ONG de Barcelona. Estaban todas. Y con un sol de la hostia para que pudiera verlo todo bien clarito. Montones de niños oscuros y medio sucios corriendo detrás de pelotas y cosas varias que rodaban cuesta abajo, cholitas prematuramente envejecidas por el sol y los hijos, viejitos cebolla, con capas y capas de ropa superpuesta y gastada, con sus ojitos chiquitos debajo de unas cejas como nubes de algodón. Y yo esforzándome por no parecer chocada, aplastada y completamente gilipolllas con mi Le Monde Diplomatique en el bolso, y un pastel enorme y blanquísimo en los brazos. Surrealismo trágico.

La mama de “m’hijita Lus” me hizo comida arequipeña deliciosa y su papá, llegado de Huaraz y vendedor de helados hasta que Lus lo ha retirado, me servía Cola local que yo apuraba porque no veas el ají. Hoy el terreno que ocuparon con sus palitos, su estera y su plástico son dos módulos de puro cemento, con la parte de arriba a medio terminar. Allí vive el abuelo, en una estancia de madera con tablones que no sellan, un gallo que cría, un hornillo y su poquita ropa sobre unas cuerdas…Afortunadamente a los sobrinos de Lus (dos niños apadrinados por la institución de unas monjas italianas) la torta de nata falsa no les pareció ningún exotismo pequeñoburgués. En una de las habitaciones de la casa Lus y sus hermanos han montado un ciber con 6 ordenadores, que estaba petado de críos. Críos que, desde este lugar fuera de lugar juegan a los mismos juegos que los nuestros (los vuestros), y tienen los mismos sueños.

Lus me llevó a pasear por el barrio y cuando regresamos Elsa, su mamá, antes de hacerme un anís “para los gases señorita” me preguntó sonriente si me había gustado lo que había visto: ¿qué podía decirle?. Donde yo sólo veía carencias, ellos ven su historia y la de su vida y el camino de 20 años que va de la estera y el plástico... al miniciber. Y eso a pesar de que Huaycán empezó como una aventura prometedora del movimiento popular, y acabó como uno de los escenarios de la guerra interna.

Sendero quería captar a las masas que iban llegando y el ejército colocó una base militar. Según el Informe de la Comisión de la Verdad, “el ejército ejecutó un plan combinado de operaciones clandestinas (rastrillajes, detenciones arbitrarias, etc.) y acciones cívicas (reparto de alimentos, construcción de obras públicas, corte de pelo)”, y las organizaciones populares tuvieron que lidiar con unos y con otros. Unos los amenazaban con quitarles las casas y otros reventaban las camionetas que bajaban a los niños al colegio. Así empezaron aquí las esperanzas de una vida mejor en la ciudad.

Después de visitar un cerro se entiende mejor por qué en Lima no hay negocio sin segureta con chaleco antibalas, no hay edificio sin reja o pinchos, y no se monta una en un carro sin bajar los seguros de las puertas...

Lus me contó que para compartir con Huaycán la idea de que “el Perú avanza” (lema del gobierno, omnipresente), el ejército se apareció un día y repartió 4 kilos de frijol y 2 latas de atún por poblador, e instaló tiendas militares con médicos y dentistas. Esa es la única riqueza macroeconómica que llega hasta el cerro.

En el Pisco, donde el terremoto del año pasado, aún la gente vive en tiendas de la cooperación internacional... pero el ministro israelí cierra acuerdos a unos metros, porque se trata de la zona agroexportadora más importante del país...

Han muerto ya más de 50 personas por frío en las zonas más altas y el gobierno se limita a repartir mantas... que son donaciones de alguna empresa solidaria...

“Rehusad la simetría a buen seguro. / Intervenir en el conflicto”. Hoy en Perú21 Alonso Cueto (“La hora azul”, resulta que el mejor libro sobre el conflicto interno, ya lo traía leído) explica una conversación con su traductora al alemán Elke Wehr. En 1999, después un paseo por la ciudad le dijo que había visto demasiados mendigos, y le preguntó cómo era posible que no se hubieran vuelto todavía guerrilleros. Ahí estamos.

Al caer la noche, desde dentro, el cerro ya no me parecía tan terrible, y a lo lejos, todo de puntitos iluminados, se veía lindo. De hecho, bajando del cerro, con el viento en la cara, cumbia de fondo y el calor humano de la combi (un minibús sobrecargado, of course) sentí un pinchazo de felicidad muy intenso. Las lágrimas querían saltar al vacío. Tuve la sensación total de haber vuelto a casa. A uno de esos momentos que atesoro para cuando me asaltan las dudas sobre mi vida curiosa y equivocada.

Y después de este ataque de lirismo, acabo con dos regalitos…

El de Jordi dM ya está esparcido por el texto, porque no sé si voy a encontrar peluches del poeta cholo y comunista. Son versos de los poemas “Himno a los voluntarios de la república”, “Voy a hablar de la esperanza” y “Trilce”.

Y una cumbia especial de Kevin Johansen para mis “cumbieras intelectuales” Laia, Judith y Amaia, y sobre todo para Ayakumoi atuyom, de regalo de bienvenida a Barcelona. Ponerle oreja.